Nos levantamos temprano para poder ver amanecer en Angkor pero mientras que negociamos el precio del tuk tuk con los conductores y llegamos a los templos ya es completamente de día. Al final contratamos el tuk tuk en una guest house por 22$ todo el día hasta el atardecer.
Tengo que decir que Angkor no me impresionó tanto como esperaba, quizás después de ver las ciudades de Ayutthaya y Sukhothai los templos ya no me sorprenden tanto aunque estos sean diferentes. Desde luego el Angkor Wat es admirable a la par que gigantesco. Bayon también es uno de los más visitados con sus gigantescas caras de piedra. En el Ta Prohm parece que los árboles están devorando el templo. En este último se rodaron escenas de la película Tom Raider protagonizada por Angelina Jolie. El antiguo reino de Angkor se encuentra en medio de la selva y lleno de monos. Está declarado patrimonio mundial de la Unesco.
En el restaurante en el que comimos pude ver como había una parte para los locales y otra para los turistas separada disimuladamente. Apuesto que la diferencia de precios entre unas cartas y otras es abismal. A parte de ser caro, la comida no estaba nada buena y se equivocaron con mi plato.
Justo después de comer se nos acercaron unas niñas que vendían souvenirs. Una muy graciosa me dijo que un imán era 1$ y le dije que no porque ya había comprado los imanes el día anterior en el mercado de la ciudad. Ella empezó a rebajar la oferta a dos, tres, cuatro por un 1$ hasta que llegó a cinco imanes por 1$ y nosotros no podíamos parar de reir. La noche anterior compré tres por 2$. La verdad es que aunque no los necesitaba no podía resistirme a semejante ofertón y la simpatía de la mocosa y acepté. A cambio se tenía que hacer una foto conmigo sonriendo. No me gusta comprar cosas a los niños porque creo que deben estar en la escuela o jugando y no trabajando, aunque visto desde fuera es muy complicado juzgar la situación sin saber todos los motivos por los que los niños trabajan en este país. Preguntamos al conductor del tuk tuk y nos dijo que algunos niños van por la mañana a la escuela y otros por la tarde. Las niñas nos dijeron que ya habían ido por la mañana.
Más tarde en otro templo otra niña con más carisma que la anterior si cabe, nos intentaba vender diez postales por 1$. Te los podía vender en cualquier idioma, inglés, francés, inglés... yo me quedé flipando. Pero a esta última no le compramos nada, si no tendré que facturar una maleta a parte con todo lo que estoy comprando aquí.
Finalizamos la visita viendo atardecer en el Angkor Wat aunque no pudimos llegar hasta arriba del todo porque ya habían cerrado (17h30) y tuvimos que conformarnos con hacer fotos desde abajo que quedaron muy chulas. Tengo que decir que al chino le gusta más una foto que otra cosa. De vuelta al hostel estamos rebentados y se nos hace de noche. Ha sido un acierto hacer el tour en tuk tuk porque las distancias entre templos son considerables y hemos estado casi 12 horas allí.
Vamos a cenar al mismo restaurante en el que comimos ayer que es bueno, bonito y barato. Mientras que David se va a dar una vuelta yo decido hacerme un masaje de pies pero como me sabe a poco decido hacerme uno de aceite que en Tailandia no me hice. Lo de quedarme solo con una toalla no me hizo mucha gracia pero cuando la masajista de dudosa reputación me ofreció lo que se conoce como un happy ending me hizo menos gracia aún. Me dio bastante asquito y por supuesto decliné su oferta con educación.
Por toda la ciudad hay mutilados por minas antipersona que piden limosna; bastante triste.
A dormir que el día ha sido muy largo.
PD: Como eran demasiadas fotos he hecho subida múltiple y ya sabeis que así aparecen de modo aleatorio.
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